Las Láminas de Seguridad convierten los cristales normales en cristales de seguridad de una forma fácil y económica protegiéndoles contra vandalismo, accidentes, explosiones, etc.
La normativa europea exige que los cristales de los Edificios Públicos sean de seguridad, especialmente los acristalamientos que estén a menos de un metro de altura y en las cercanías de las salidas de emergencia, son altamente recomendables en edificios públicos, fábricas, casas, oficinas, escaparates, colegios, hospitales, restaurantes, hoteles y sobre cualquier cristal que implique un riesgo para la seguridad de las personas.